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El jugador #12 de una selección: La información

A menudo escuchamos que los datos en cantidades masivas o big data nos ayudan en el análisis de comportamientos o tendencias y que esta información, de la mano de herramientas como el Business Intelligence (BI), nos puede ayudar a anticiparnos a ciertas situaciones y a tomar decisiones, o incluso a desarrollar modelos predictivos. 

Hoy en día, no sólo las empresas comerciales hacen uso de estos instrumentos de análisis. En otras esferas como el deporte, en especial en el fútbol, hay un jugador que viene dando sus primeros pasos, y que hace que los equipos que cuentan con él sean más competitivos, se adapten mejor a las estrategias de los directores técnicos e incluso, que sus apostadores tengan mayor probabilidad de ganar; este nuevo jugador es el Business Intelligence. Ahora bien, podrían estas herramientas informáticas ayudar a determinar, por ejemplo, ¿cuál será el próximo ganador del Mundial de la FIFA Rusia 2018?

El término Business Intelligence alude al conjunto de estrategias e instrumentos orientados a la toma de decisiones mediante el análisis de datos y su objetivo fundamental en un ámbito deportivo es mejorar, entre otras cosas, el proceso de entrenamiento de los equipos, los resultados de sus jugadores en distintas pruebas físicas mediante la identificación de los factores más importantes que afectan su desempeño y la definición de indicadores clave de rendimiento, así como la identificación de jugadas claves y elementos fuertes o desventajas dentro del terreno de juego.

Las herramientas tradicionales para visualizar información no permiten hacer diagnósticos tan precisos como los hechos con BI, debido a que la data se encuentra dispersa en numerosas tablas o no está tan orientada al análisis.

Debido a esto, algunos clubes de fútbol y compañías han incursionado en el uso de sistemas de Business Intelligence, que integran la información de distintas fuentes de datos en un solo lugar, optimizando el tiempo y respondiendo a preguntas estratégicas. 

Es así como, mientras algunas empresas pueden consultar cuál ha sido su producto más vendido en una zona durante un determinado periodo de tiempo, un equipo de fútbol puede saber cuál ha sido el jugador de su equipo que más ha mejorado desde que se implantó el nuevo sistema de entrenamiento o cuál es la zona del campo de juego por la que más atacan a determinado rival. Es importante resaltar que no importa el tamaño de la empresa o de la escuadra deportiva, las técnicas de BI pueden ser aplicadas por cualquiera que necesite tomar decisiones sustentadas en el análisis de sus datos.

Las viejas técnicas de análisis, como volver a ver partidos enteros para analizar las jugadas del rival ya están a puertas del retiro. Actualmente, un director técnico tiene la capacidad de enviar a los teléfonos móviles de sus jugadores sus propias conclusiones respecto a jugadas y técnicas específicas, propias y de sus contrincantes, así como un empresario puede tener las cifras de su empresa en tiempo real y al alcance de su mano, con los estudios realizados por Invamer, los cuales pueden ser presentados en línea mediante plataformas tecnológicas de fácil uso y acceso desde cualquier dispositivo.

Muchos aseguran que, gracias a este tipo de prácticas, la selección alemana se consagró campeona del mundial de fútbol en Brasil 2014. Fue precisamente esa selección la que le abrió el camino al análisis de Big Data en el mundo del fútbol, por medio de herramientas diseñadas para el análisis y procesamiento de data para la toma de decisiones, con respecto a técnicas de entrenamiento, estrategias dentro del terreno de juego, habilidades del rival, entre otras. 

Aun contando con estas herramientas, quien tiene la decisión final es el director técnico, pero es posible que una selección que haga uso de la información propia y de sus rivales, tenga mayores posibilidades de obtener mejores resultados.

La relevancia que ha adquirido el manejo de la información es innegable, tanto en el mundo comercial como en el deportivo. Son estos datos masivos los que combinados entre sí, ofrecen una visión que de otra forma permanecería oculta.

Cabe preguntarse si algún análisis contemplaba la terminación del contrato de Julen Lopetegui como seleccionador español a pocas horas de empezar el mundial, o la lesión de Édinson Cavani justo antes de que Uruguay jugara los cuartos de final ante Francia. Siempre quedará lugar para la sorpresa y lo no previsto, por lo que es válido aclarar que los datos no nos convierten en adivinos, pero sí nos permiten tomar las mejores decisiones ante situaciones de incertidumbre.

Por: Simón Parra

Fuentes:

Diario Marca (2014). El “arma secreta” de Joachin Low. Madrid, España. Diario Marca, edición virtual.

VIU (2017). ¿Qué es business intelligence y cuáles son sus aspectos clave? Valencia, España. Universidad Internacional de Valencia, edición virtual.

CIO España (2017). ¿Qué es BI? Definición y soluciones de Business Intelligence. España. CIO España edición virtual.